Con el verano llegan los meses de más calor del año. Las altas temperaturas pueden causar problemas en el funcionamiento normal de los vehículos, dando lugar a numerosas averías de verano . En este artículo se explican las averías más comunes en verano y las formas de evitarlas.
Averías de verano en coches más comunes
Con el calor, es más probable que aparezcan determinadas averías, pero es probable evitarlas y prevenirlas. Algunas de estas averías se producen en los neumáticos, en el aire acondicionado, en el limpiaparabrisas o en los sistemas de refrigeración, entre otras partes de vital importancia para el correcto funcionamiento del vehículo.
Las averías más comunes se producen principalmente en el electroventilador y en el termostato , que son los elementos que regulan la temperatura del motor. Estos elementos del vehículo se encargan alimentar al motor del líquido refrigerante. Cuando este líquido no llega, el motor se sobrecalienta.
Reventones en los neumáticos
Con el calor, los neumáticos sufren un grave deterioro. Esto se debe a que el efecto del calor del asfalto hace que el desgaste de las gomas sea mayor. Además, los desplazamientos en verano son más largos que en el resto del año, por lo que el desgaste del neumático sigue siendo más elevado.
Fallos del aire acondicionado
Otra de las averías de verano más frecuentes son los problemas con el aire acondicionado, ya sea porque los filtros se obstruyen o porque el contacto se deteriora de una forma más rápida.
Para evitar fallos con el aire acondicionado, es esencial revisar el estado de los filtros del aire, limpiarlos y cambiarlos si fuera necesario.
Con independencia de cuál sea la parte del vehículo que da fallos, es fundamental acudir a un profesional especializado para que repare los diferentes tipos de averías de verano que se pueden presentar y así obtener resultados de calidad y duraderos.
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